Los órganos reguladores de juegos de azar deben considerar avanzar en el desarrollo de políticas regulatorias; pues, los mismos son parte de un rubro que requiere de periódicas inserciones técnicas que actualicen las normas que reglamentan la operación de juegos de azar; por ello la adquisición de conocimientos más profundos sobre el funcionamiento del mercado del juego es de trascendental importancia, especialmente con relación a aquellos juegos que se desarrollan con el avance de la tecnología. En ese aspecto los juegos on line merecen especial atención. Los contratos de concesión son el reflejo del estado regulatorio de cada jurisdicción, por ello la modalidad y contenido de los mismos deben basarse en principios y normas que garanticen la seguridad jurídica de todas las personas que intervienen en la actividad lúdica.